No hay azúcar de tu parte,
no te ilusionas,
no te das cuenta que podemos ser
los más niños jugando con el escarabajo.
Apartar la maleza,
en búsqueda del tesoro secreto, ¡secreto!,
he allí lo más bello de la vida.
Pero no vienes, no te interesa.
Se diría que no sabes apreciar
el pan que se te pone enfrente.
Tienes demasiado;
todos tienen demasiado,
y es justamente por eso que no comparten.
Pisoteando se pasan la vida:
¿la vida?, el corredor ése
por donde tambalean indignos.
Pues bien, si no quieres dar no importa:
ya veré cómo le hago.
Poemas-abortos. Considérese este blog un altar de mis fetos sucesivos, está destinado a reunir las sustancias residuales. Puah… La web es la tremebunda fosa séptica que la totalidad de los poetas esperábamos desde el principio de los tiempos, el Amatitlán en donde podemos vomitar todo aquello que no se alzó a la luz de ser libro, el basurero sinfónico: la Zona 3. Y ya se sabe que en la Zona 3 nunca hubo cocaína: sólo veneno y gamezán. Maurice Echeverría.
4 comentarios:
estás perdiendo el miedo. <los grandes no escriben para ganar premios.
Quise decir, estás perdiendo el miedo y eso está bueno porque los grandes no escriben para ganar premios.
Saludos
Este poema es uno de esos que he leído varias veces en esta lista.
Leo y releo: buenísimo. Me gustan los poemas con los cuales me identifico: este es uno de esos tantos.
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